IMPORTANCIA
DE LA RECUPERACIÓN DE LOS REFRIGERANTES
Los circuitos frigoríficos usados en
la actualidad, en su inmensa mayoría utilizan gases Fluorados, que su
liberación a la atmosfera repercute en las condiciones climáticas de nuestro
planeta.
En este Blog tratamos de la limpieza
de esos circuitos y utilizando esos mismos gases, lo que nos lleva a extremar
al máximo el cuidado de la emisión de dichos gases a la atmosfera.
Antes de entrar en tratar los
distintos métodos y sistemas de limpieza, así como la elaboración de un equipo
que nos permita desarrollar dichas funciones, deberemos de tener un
conocimiento básico de las repercusiones que tiene dicha actividad y sus
consecuencias, para tomar conciencia de ello y actuar con la mayor de las
precauciones.
Estos trabajos de manipulación de
gases, están regulados por los reglamentos Europeos y legislación Española, con
lo que nos lleva a incidir en la necesidad de que solo pueden llevarse a cabo
por personal debidamente cualificado y habilitado para realizarlos.
LA
CAPA DE OZONO
Se le llama así a la concentración máxima de ozono
estratosférico presente en la atmósfera terrestre de manera natural.
El ozono es un gas formado por tres átomos de oxígeno
(O3).
Las moléculas de oxígeno contenidas en el aire que
respiramos están compuestas por dos átomos de oxígeno solamente (O2).
En la atmósfera de la Tierra, este gas es un componente
extremadamente raro: de cada 10 millones de moléculas de aire, aproximadamente
tres son de ozono.
La mayoría de las moléculas de ozono, cerca del 90%, se
encuentran en la atmósfera superior (la estratósfera), entre 10 y 50 kilómetros
por encima de la superficie terrestre, representando una barrera natural frente
a la radiación ultravioleta (UV) emitida por el sol.
La vida en la Tierra depende de esta delgada capa de gas
gracias a que absorbe prácticamente toda la radiación ultravioleta perjudicial
(UV-B), protegiendo así la vida vegetal y animal.
El ozono estratosférico
es diferente del ozono superficial
El ozono superficial, también llamado troposférico, es
producido por las emisiones procedentes de la industria y del tránsito en
condiciones meteorológicas específicas.
Es parte del smog fotoquímico y por ser un gas irritante,
puede causar problemas respiratorios especialmente en los niños y las personas
mayores, así como dañar las plantas.
El ozono no se encuentra uniformemente distribuido en la
columna atmosférica.
En la figura 2 se puede observar
la distribución vertical del ozono.
Agotamiento de la Capa
de ozono y Radiación UV
Los científicos clasifican la radiación UV, según su
longitud de onda, en tres tipos: UV-A, UV-B y UV-C.
La banda UV-C no llega a la superficie de la tierra.
La banda UV-B es filtrada parcialmente por la capa de
ozono.
La banda UV-A no es filtrada por la capa de ozono en
absoluto.
No obstante, la radiación UV-B es la principal
responsable de los daños en la salud y de los impactos negativos en el medio
ambiente.
El equilibrio dinámico entre la formación y la
descomposición de las moléculas de ozono depende de la temperatura, la presión,
las condiciones energéticas y la concentración de moléculas de diferentes
gases.
El equilibrio se puede perturbar, por ejemplo, por la
reacción de sustancias cloradas o bromadas con las moléculas de ozono,
produciendo la consecuente destrucción de estas últimas.
Si el proceso de destrucción de las moléculas de ozono es
más rápido que la producción natural de nuevas moléculas para remplazarlas, se
altera el equilibrio y se produce lo que se conoce como déficit de ozono.
El agotamiento de la capa de ozono llevaría a la
reducción de su capacidad protectora y consecuentemente a una mayor exposición
a la radiación UV-B.
La Tierra y sus habitantes tienen mucho en juego en la preservación
del frágil escudo que forma la capa de ozono.
CONSECUENCIAS DE LA
DESTRUCCIÓN DE LA CAPA DE OZONO
La exposición moderada a la radiación UVB no presenta
peligro; de hecho, en los seres humanos constituye una parte esencial del
proceso de formación de la vitamina D en la piel.
Sin embargo, el aumento de los niveles de exposición
puede producir efectos perjudiciales para la salud humana, los animales, las
plantas, los microrganismos, los materiales y la calidad del aire.
Salud humana
En los seres humanos, la exposición prolongada a la
radiación UV-B conlleva el peligro de daños oculares, entre los que figuran
reacciones graves tales como ‘ceguera de la nieve’, deformación del cristalino,
presbicia y cataratas.
La radiación UV-B puede afectar el sistema inmunológico
con daño del ADN, disminuyendo las defensas naturales lo cual conduce a un
aumento en la frecuencia y en el número de casos de enfermedades infecciosas.
El aumento de la radiación UV-B probablemente acelera la
tasa de foto envejecimiento, aumenta la incidencia del cáncer de piel, tanto
del tipo no melanoma (el menos peligroso) como melanoma maligno cutáneo.
Medio ambiente
El agotamiento de la capa de ozono produce efectos
adversos serios sobre la agricultura y afecta considerablemente los bosques.
La radiación ultravioleta produce cambios en la
composición química de varias especies de plantas, disminuyendo la cantidad y
calidad de las cosechas.
También produce daño a los organismos acuáticos
primarios: plancton, plantas acuáticas, larvas de peces, camarones y cangrejos.
En estudios realizados se demuestra que las radiaciones
solares UV-B y UV-A tienen efectos adversos en el crecimiento, la fotosíntesis,
los contenidos proteínico, pigmentario y la reproducción del fitoplancton,
alterando la cadena alimenticia en los ecosistemas marinos y consecuentemente,
reduciendo la producción pesquera mundial y despojando a los océanos de su
potencial como colectores de dióxido de carbono, gas que contribuye a agravar
el problema del calentamiento global.
Los materiales empleados en la construcción, pinturas,
gomas, madera, plásticos y envases son degradados por la radiación UVB.
El daño ocasionado varía desde el decoloramiento hasta la
pérdida de calidad y fuerza mecánica. El aumento de la radiación UV-B puede
limitar la duración de esos materiales y obligar a utilizar procesos de
producción más costosos, generando pérdidas económicas anualmente.
La radiación UV ocasiona un aumento del “smog
superficial” especialmente en las ciudades donde las emisiones de la industria
y de los automóviles proveen la base para las reacciones fotoquímicas.
Esto produce sus propios efectos adversos en la salud de
los seres humanos y en el medio ambiente.
CALENTAMIENTO GLOBAL
El calentamiento global es el aumento de la temperatura
media del planeta, generado por un desequilibrio en el balance térmico
consecuencia del incremento de gases efecto invernadero en la atmósfera.
El efecto invernadero es un proceso natural que consiste
en la retención por acción de ciertos gases presentes en la atmósfera, de una
determinada fracción de la radiación solar que incide sobre la tierra.
Este fenómeno ha dado lugar a unas condiciones climáticas
propicias para el desarrollo de vida del planeta. Sin embargo, como resultado
de las actividades humanas se ha alterado el proceso en un grado tal, que
existe hoy una sincera y demostrada preocupación por los efectos a mediano y
largo plazo, sobre el balance natural en el planeta.
La causa del incremento hasta niveles perjudiciales de la
concentración de gases de efecto invernadero, se ha basado en la emisión
creciente de estos gases por las actividades industriales, agrícolas,
forestales y de transporte, combinada con una disminución de las zonas boscosas
capaces de fijar el carbono de la atmósfera.
La combustión en hidrocarburos, carbón y biomasa asociada
a estas actividades, conlleva la emisión de grandes volúmenes de gases que
contribuyen al efecto invernadero.
Una primera consecuencia, muy posible, es el aumento de las
sequías: en algunos lugares disminuirá la cantidad de lluvias. En otros, la
lluvia aumentará, provocando inundaciones.
Una atmósfera más calurosa podría provocar que el hielo
cerca de los polos se derritiera. La cantidad de agua resultante elevaría el
nivel del mar. Un aumento de sólo 60 centímetros podría inundar las tierras
fértiles en el planeta, de las cuales dependen cientos de miles de personas
para obtener alimentos. Las tormentas tropicales podrían suceder con mayor
frecuencia.
La corriente del Niño es uno de los ejemplos más claros
de los problemas que trae el calentamiento global, desequilibra el estado
climático del planeta haciendo que en algunos lugares llueva demasiado hasta
inundarlos y en otros sea totalmente una sequía, también se pueden citar el
cambio abrupto de temperatura y presión en la atmósfera que trae como consecuencia
grandes secuencias de tornados y huracanes. Esto se ve más en las zonas tropicales
en donde los tornados aparecen en determinada época del año y por los cambios climáticos
estos reaparecen muy a menudo.
Conocemos las consecuencias que podemos esperar del cambio
climático para el próximo siglo, en caso de que no vuelva a valores normales de
temperatura media:
· Aumento de sequías en unas zonas e inundaciones en
otras.
· Mayor frecuencia de formación de huracanes.
· Progresivo deshielo de los casquetes polares, con la
consiguiente subida de los niveles de los océanos.
· Incremento de las precipitaciones a nivel planetario
pero lloverá menos días y más torrencialmente.
· Aumento de la cantidad de días calurosos, traducido en
olas de calor. Igualmente se espera que los extremos de calor y de frío sean
mayores (veranos más calientes e inviernos más fríos).
DEFINICIÓN DE LAS
UNIDADES PAO Y PCG
La previsión de cambios en la dinámica ambiental del
planeta, en los próximos años, se basa íntegramente en modelos de simulación.
Comprensiblemente la gran mayoría de los modelos se han concentrado sobre los
efectos de la contaminación de la atmósfera por gases invernadero y agentes agotadores
de la capa de ozono.
Una preocupación presente es determinar cuánto daño
causan estas emisiones, gases o sustancias, para lo cual se determinaron las
siguientes unidades:
· PAO: (Potencial de Agotamiento de la capa de Ozono - en
inglés Ozone Depletion Potential ODP).
Es la habilidad que tienen las sustancias para agotar la
capa de ozono.
A cada sustancia se le asigna un PAO respecto a una
sustancia de referencia: el CFC-11 cuyo PAO por definición tiene el valor de 1.
· PCG: (Potencial de Calentamiento Global - en inglés
Global Warming Potential – GWP)
Es la habilidad de un gas de absorber radiación
infrarroja.
Esta unidad se estima teniendo como referencia el
calentamiento atmosférico que genera el Dióxido de Carbono (CO2).
SUSTANCIAS AGOTADORAS DE
OZONO (SAO)
Las sustancias que agotan la capa de ozono (SAO) son
sustancias químicas que tienen el potencial de reaccionar con las moléculas de
ozono de la atmósfera.
La actividad del hombre produce gases halógenos que
contienen átomos de cloro y bromo; estos gases, una vez liberados en la
atmósfera, tienen el poder de destruir las moléculas de ozono en una reacción
fotoquímica en cadena.
Una vez destruye una molécula de ozono, el cloro o bromo
de la SAO está disponible para destruir otra más.
La duración de la vida destructiva de una SAO puede
extenderse entre los 100 y 400 años, dependiendo de su tipo.
Por consiguiente, una molécula de SAO puede destruir
cientos de miles de moléculas de ozono.
Las sustancias destructoras del ozono más comunes pertenecen
a la familia de los clorofluorocarbonos, o CFC, que empezaron a producirse en
Bélgica en 1892.
Las SAO se emplean como refrigerantes en los circuitos de
enfriamiento, en la fabricación de espumas, como solventes de limpieza, en la
industria electrónica, como propulsores, en los productos en aerosol, como
esterilizantes, como agentes para combatir el fuego, como fumigantes, para
controlar pestes y enfermedades y como materias primas.
En la tabla siguiente se cita las sustancias actualmente
identificadas como SAO y sus usos mas frecuentes.
La liberación de las SAO puede suceder de las siguientes
maneras:
· Por despresurización y purga durante el mantenimiento
de sistemas de refrigeración y aire acondicionado.
· Uso de solventes como agentes de limpieza.
· Aplicación de Bromuro de Metilo al suelo en los casos
de cuarentena y pre-embarque.
· Destrucción inadecuada de productos que contienen SAO
como refrigeradores, espumas, etc.
· Circuitos de refrigeración que presentan fugas.
· Liberación de aerosoles que usan CFC como propelentes.
RELACIÓN ENTRE
CALENTAMIENTO GLOBAL Y AGOTAMIENTO DE LA CAPA
DE OZONO
Estos dos problemas ambientales globales están
relacionados entre sí, pero son diferentes.
Como se mencionó anteriormente, la destrucción de la capa
de ozono trae como consecuencia una mayor exposición a la radiación
ultravioleta, lo cual pone en riesgo la vida y la salud de los seres vivos
expuestos.
Por otra parte, el calentamiento global causado por los
gases de efecto invernadero implica el aumento de la temperatura media del
planeta, con los efectos negativos ya descritos.
La protección de la capa de ozono es el objeto central
del Protocolo de Montreal, mientras que la reducción de gases de efecto
invernadero, es el objetivo del Protocolo de Kioto y de la Convención sobre
cambio climático.
Sin embargo, es importante destacar que las SAO, son
también gases efecto invernadero.
Por esta razón, cuando se sustituyen estas sustancias a
través de los procesos de reconversión industrial, se reducen los efectos tanto
sobre la capa de ozono, como sobre el cambio climático.
Igualmente es importante considerar que un aumento de la
temperatura media del planeta, podría significar un aumento del proceso de
deterioro de la capa de ozono, o su recuperación más lenta. Este es un ejemplo
de la relación estrecha que hay entre los diferentes componentes y procesos
ambientales, tanto a nivel global como local.
Nota: extracto de BUENAS PRÁCTICAS EN REFRIGERACIÓN, RECUPERACIÓN
Y RECICLAJE DE REFRIGERANTES del MINISTERIO DE AMBIENTE, VIVIENDA Y DESARROLLO
TERRITORIAL de Colombia. Ver documento completo aquí. UNIDAD TÉCNICA OZONO – UTO.
OTRAS INFORMACIONES
RELACIONADAS
REGLAMENTACIÓN SOBRE GASES FLUORADOS
RD 795/2010, de 16 de junio, por el que se regula
la comercialización y manipulación de gases fluorados y equipos basados en los
mismos, así como la certificación de los profesionales que los utilizan.
Notas informativas de aplicación del
RD 795/2010 de gases fluorados
Nota informativa: Normativa ambiental
sobre gases fluorados para usuarios y propietarios
de equipos de refrigeración o climatización:
Ley 34/2007, de 15 de
noviembre de calidad del aire y protección de la atmosfera.
Ley 20/1986 de 14 de
mayo, Básica de residuos toxicos y peligrosos.
Real decreto 833/1988
de 20 de julio, por el que se aprueba el reglamento para la ejecución de la Ley
20/1986, Básica de residuos toxicos y peligrosos.
Real decreto 952/1997
de 20 de junio, por el que se modifica el reglamento para la ejecución de la Ley 20/1986, de 14 de
mayo, básica de residuos tóxicos y peligrosos, aprobado mediante RD 833/1988 de 20 de
julio.
Real Decreto 2060/2008, de 12 de diciembre,
por el que se aprueba el Reglamento de equipos a presión y sus instrucciones
técnicas complementarias
REAL DECRETO 379/2001,
de 6 de abril, por el que se aprueba el Reglamento de almacenamiento de
productos químicos y sus instrucciones técnicas complementarias MIE APQ-1, MIE
APQ-2, MIE APQ-3, MIE APQ-4, MIE APQ-5, MIE APQ-6 y MIE APQ-7.
Real Decreto 717/2010,
de 28 de mayo, por el que se modifican el Real Decreto 363/1995, de 10 de
marzo, por el que se aprueba el Reglamento sobre clasificación, envasado y
etiquetado de sustancias peligrosas y el Real Decreto 255/2003, de 28 de
febrero, por el que se aprueba el Reglamento sobre clasificación, envasado y
etiquetado de preparados peligrosos.
Ley22/2011, de 28 de
julio, de residuos y suelos contaminados.
ORDENMAM/304/2002, de
8 de febrero, por la que se publican las operaciones de valorización y
eliminación de residuos y la lista europea de residuos.
Protocolos y reglamentos CE
Reglamento Europeo (CE) 2037/2000 sobre
sustancias que agotan la capa de ozono
Reglamento Europeo (CE) 303/2088.
Programas de formación y certificación
Reglamento europeo (CE) 1005/2009 sobre
las sustancias que agotan la capa de ozono.
Reglamento europeo (CE) 842/2006 sobre
determinados gases fluorados de efecto invernadero.
Reglamento europeo (CE) 1494/2007 sobre
el etiquetado y requisitos adicionales de los productos y aparatos que
contengan determinados gases fluorados.
Reglamento europeo (CE) 1516/2007 sobre
requisitos de control de fugas para equipos que contengan gases fluorados.
REGLAMENTO (CE) nº 1907/2006
DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO de 18 de diciembre de 2006 relativo al
registro, la evaluación, la autorización y la restricción de las sustancias y
preparados químicos (REACH), por el que se crea la Agencia Europea de
Sustancias y Preparados Químicos, se modifica la Directiva 1999/45/CE y se
derogan el Reglamento (CEE) nº 793/93 del Consejo y el Reglamento (CE) nº
1488/94 de la Comisión así como la Directiva 76/769/CEE del Consejo y las
Directivas 91/155/CEE, 93/67/CEE, 93/105/CE y 2000/21/CE de la Comisión
REGLAMENTO (CE) No 1272/2008 DEL
PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO de 16 de diciembre de 2008 sobre
clasificación, etiquetado y envasado de sustancias y mezclas, y por el que se
modifican y derogan las Directivas 67/548/CEE y 1999/45/CE y se modifica el
Reglamento (CE) no 1907/2006
REAL
DECRETO 1495/1991, de 11 dc octubre. por el que se dictan
las disposiciones de aprobación de la Directiva del (consejo de las
comunidades europeas S7/404/CEE sobre recipientes a presión simple)
REAL
DECRETO 769/1999, de 7 de
mayo, por el que se dictan las disposiciones de aplicación de la Directiva del
Parlamento Europeo y del Consejo, 97/23/CE, relativa a los equipos de presión y
se modifica el Real Decreto 1244/1979, de 4 de abril, que aprobó el Reglamento
de aparatos a presión.